Hay tres causas que convierten a los seres humanos en verdaderos miserables: la envidia, el miedo y la venganza.
La envidia, el deseo irrefrenable de “ser el otro”, es un claro signo de debilidad, de no aceptación de si mismo, de negación de “lo que se es”. Esta negación de si mismo impide avanzar, superar sus debilidades y carencias. Para hacerlo es imprescindible una mínima objetividad y sentido de la autocrítica de la que carece el envidioso.
El miedo es un sentimiento reflejo, visceral; transforma a los seres vivos en implacables e irracionales. Las decisiones adoptadas bajo el miedo siempre son lamentadas con posterioridad.
La venganza focaliza la razón de ser en la consecución de la misma. No existe nada más; la existencia se empequeñece, se limita exclusivamente a la razón de conseguir el objeto de la venganza. Nada tiene valor, perdiéndose la visión global de la realidad y la perspectiva de los procesos vitales y sociales.
La decisión de otorgar el segundo grado penitenciario al etarra De Juana Chaos es legal, signo de fortaleza, inteligencia y sentido del Estado.
Legal porque De Juana Chaos ha cumplido según las leyes la condena impuesta por los 25 asesinatos. Y la ha cumplido con un beneficio de 12 años de reducción otorgado en 1998, siendo ministro de justicia el Sr. Acebes y en el contexto de las negociaciones llevadas a cabo por el Gobierno de Sr. Aznar con ETA, con la justificación de la publicación de dos artículos en Gara en los que defendía la violencia terrorista. Posteriormente es condenado a tres años, de los que ya ha cumplido más de la mitad, por un delito de amenazas en otros dos artículos, existiendo votos particulares de magistrados del tribunal que los condena por considerar que no son delitos sino libertad de expresión. Sentencia que está apelada y puede ser anulada por el Tribunal de La Haya.
Signo de fortaleza porque es adoptada desde la coherencia en la firme creencia de que al terrorismo se le vence desde la defensa del Estado de Derecho, aunque nos repugne que este no permita anular los beneficios penitenciarios dados por Acebes por ser firmes. La defensa de la Ley y la responsabilidad que otorgan unos firmes principios éticos es lo que siempre nos ha fortalecido a los demócratas frente al terrorismo.
Inteligente porque ha sido adoptada desde el análisis sereno de la realidad, debilidad y división entre ETA y su base social. Porque fortalece a los que en el mundo de la izquierda abertzale empujan por un fin definitivo de la violencia y de ETA, desactivando las estrategias de victimización de los más radicales.
Con sentido del Estado porque es incluyente socialmente. Fortalece al Estado español incluyendo en él a la base social de la izquierda abertzale. Una decisión desde la venganza excluye a esta base social, radicaliza y debilita a las instituciones del Estado, tanto del Gobierno Central como a la Autonomía vasca.
ETA surge durante el franquismo, como reacción contra el excesivo centralismo que supedita y condena a la oligarquía vasca a estar subordinada a la oligarquía central. La lucha por su independencia le lleva a reivindicar la construcción de su propio estado siguiendo el camino y los métodos de la descolonización. Ello supone crear los aparatos de estado necesarios, incluido su propio ejercito. La ambigua y dual posición de la iglesia como aparato de estado es muy significativa de este carácter de clase oligárquico del conflicto vasco.
La abstención del nacionalismo vasco en el referéndum de la Constitución Española, en la transición del sistema de dominación dictatorial al sistema de dominación democrático representativo, explicitaba la desconfianza de la oligarquía vasca en el nuevo sistema político como cauce para la defensa y representación de sus intereses propios. La evolución en estos treinta años del capitalismo mundial, habiéndose superado los límites de los estados-nación, transformado el BBVA y el entramado Mondragón en trasnacionales, hace perder la razón de ser de ETA, y con ella su base social.
Reconociendo que corresponde a la ciudadanía vasca hacer su propio análisis y determinar la ruta a seguir para la construcción de una sociedad vasca más justa y democrática, sugiero se analice el espejismo progresista provocado por el caso sui generis del desarrollo en el franquismo de la economía social del entramado de Mondragón, impulsada desde la Orden religiosa de los jesuitas, que entra en contradicción con el franquismo como entramado empresarial y como economía social. Este carácter dual de la Corporación Mondragón da un apoyo popular a la izquierda abertzale, y provoca, en mi opinión, ese espejismo progresista del apoyo al independentismo trasnochado y fuera de su tiempo.
ETA tiene que desaparecer. Ha perdido todo sentido histórico. Su existencia no sólo dificulta, impide que en las elecciones se exprese el carácter masivo del bloque social de progreso. Los partidos demócratas y progresistas del País Vasco deberían ofrecer a la economía social del complejo Mondragón la visión, los retos y el papel que debe jugar ésta en la construcción del socialismo del Siglo XXI, de la nueva organización social que ya se está construyendo. Creo que se aceleraría el fin definitivo de ETA.
La aptitud del PP en la lucha antiterrorista, que parte de la no aceptación de su papel de oposición tras las elecciones del 14 de Marzo, que ha trasladado sus miedos a la ciudadanía con una irrespirable crispación mediática, y a la que no le ha importado desacreditar al poder judicial y al Gobierno legítimo de España, le lleva a la radicalización, a la irracionalidad de revitalizar a la extrema derecha, y a enajenarse el apoyo de la ciudadanía que quiere paz y bienestar. El PP con esta aptitud puede cerrar filas, militarizar a sus adeptos, pero nunca podrá aspirar a ampliar su base social, a volver a ser partido de gobierno. Esta aptitud es un suicidio político para el PP.
Me he permitido postear este texto al expresar de una forma tan clara como contundente de que estamos hablando cuando tratamos el tema de De Juana.... Un saludo